Acerca de los incendios en áreas naturales
Ciencia del fuego
Prevenir y combatir los incendios no deseados comienza por comprender la ciencia detrás de cómo ocurren.
El fuego se produce cuando el combustible en presencia de oxígeno y a una temperatura extremadamente alta, se convierte en gas. Las llamas son el indicador visual de ese gas caliente.
El fuego también puede originarse a partir de fuentes de menor temperatura. Con el tiempo, los materiales combustibles, como las brasas humeantes, pueden alcanzar el calor suficiente para encenderse.
Triángulo del fuego
El triángulo del fuego es una forma sencilla de entender los componentes del fuego:
- Calor: El calor es responsable de encender y propagar el fuego.
- Combustible: El combustible es cualquier material que se queme.
- Oxígeno: El oxígeno descompone el combustible y libera calor.
Los incendios en áreas naturales involucran muchos factores:
Supresión de incendios: Las tácticas de supresión de incendios se han vuelto cada vez más complejas, especialmente con el aumento del desarrollo residencial en áreas de interfaz urbano forestal. Las tácticas incluyen el despliegue de bomberos profesionales, el uso de helicópteros para arrojar agua o retardantes de fuego, o el uso de bulldozers para crear cortafuegos.
Tratamiento de combustibles: El tratamiento o la reducción de combustibles es parte del manejo activo de incendios. Reduce materiales combustibles, como hojas caídas, ramas, crecimiento excesivo de plantas, combustibles de escalera y vegetación muerta.
Combustibles de escalera: Los combustibles de escalera permiten que el fuego se propague verticalmente a través de la vegetación, desde el nivel bajo (pasto) al nivel medio (arbustos) hasta el nivel alto (árboles). En un solo árbol, el fuego puede subir desde las ramas a nivel del suelo, luego a las ramas medias, y finalmente, hasta la copa.
Temporadas de incendios: Los patrones de clima más secos y cálidos producen temporadas de incendios más largas. Algunas zonas experimentan dos temporadas de incendios más cortas, en primavera y otoño, mientras que otras experimentan una temporada más larga durante todo el verano. La acumulación de combustibles y las estaciones secas prolongadas han contribuido a lo que se le conoce como un "año de incendios" en algunos lugares, lo que refleja la necesidad de controlar los incendios en áreas naturales durante todo el año.
Topografía: Se refiere a las características físicas del terreno en sí, que pueden tener un impacto en los incendios en áreas naturales. Variables como las pendientes (incluyendo su dirección y posición) y las formas del relieve (por ejemplo, cañones, crestas y cuencas) pueden influir en el comportamiento del fuego.
Ecología y otros factores: Agrupaciones densas de árboles similares y patrones de sequía pueden contribuir a ciclos más graves de plagas de insectos y enfermedades, que generan grandes áreas de madera muerta y moribunda.
Más información sobre los incendios en áreas naturales
El fuego es uno de los agentes de cambio más importantes de la naturaleza. Es una poderosa fuerza natural que debemos comprender y respetar completamente para ayudar a controlarla de la mejor manera posible.